lunes, enero 22, 2007

"Navarra tiene mucho que perder si UPN crea tensiones con el Gobierno central"

Juan Cruz Alli, Presidente de CDN.
Juan Cruz Alli es un hombre optimista. Alegre y locuaz, el presidente de CDN reconoce las dificultades a las que se enfrentará su partido en las elecciones de mayo, pero está seguro de que mejorará los resultados que le auguran las encuestas. "Siempre nos dan de menos", dice. Reivindica el "centro progresista" para CDN, espacio propio desde el que critica por igual a PP y PSOE. "En la cuestión de la violencia, tan electoralistas son unos como los otros", denuncia. Cree además que Zapatero se ha equivocado en la gestión del proceso de paz: "No sé por qué se escandalizó tanto Zapatero cuando Rajoy le dijo aquello de que si no cumplía le iban a poner bombas. Es lo que le dijo ETA en el último comunicado. Puede que hubiera malicia en las palabras de Rajoy, pero le dio donde dolía".
¿No le pareció demasiado agresivo?
No creo que Rajoy sea el más propicio para este tipo discurso, pero lo ha tenido que asumir de mano de Acebes o Zaplana. Pensaba que Rajoy iba a ser más centrista, más moderado y más integrador. Difícilmente lo puede entender la sociedad si se cierra tan de plano.
¿Entiende la sociedad la ausencia del PP de la manifestación de Madrid?
Lo que ha ocurrido con las manifestaciones y con el debate del pasado lunes es lamentable. Han sido dos momentos en los que ha prevalecido el electoralismo sobre la visión de Estado. La sociedad, en una situación de tensión, busca que sus responsables políticos tengan una visión que trascienda del interés a corto plazo. Es ahí donde se demuestra dónde están los hombres y mujeres de Estado.En Navarra fue diferente.Aquí fuimos capaces de ir todos juntos, con ausencias significativas, pero ir. No entiendo la postura del PP o de la AVT cuando es la sociedad la que pide salir a la calle. Puede que no les gustara el lema, pero habrá que respetar a los convocantes, ¿no? En Navarra dimos una lección.
¿A qué ausencias se refiere?
El presidente debía haber estado aquí. Cuando se está en un cargo público, uno se debe al cargo todo el día, y hay momentos en los que hay que priorizar la agenda. Sobre todo cuando es la sociedad la que lo plantea.
¿Cómo interpreta el atentado?
Los terroristas buscaban un golpe de efecto, pero ha sido una tragedia. Es un atentado con muertes. No hay ninguna justificación, de voluntad de paz, nada. Viven fuera de la realidad social y siguen creyendo que pueden hacer claudicar al Estado. Han quemado su última oportunidad, y hará falta una nueva generación, y no van a ser los jóvenes de la kale borroka.
¿Qué le parece que Otegi proponga una "reflexión interna" para valorar la credibilidad de la tregua?
El de Otegi es un pequeño paso, mínimo, sin condenar la violencia. Hace falta mucha valentía y mucha honestidad intelectual para decir lo que en su día dijeron Zabaleta y otras gentes, y Batasuna no tiene pinta de hacerlo. La diferencia que escenificaron Otegi y Barrena es estratégica, los dos son cautivos de los de las pistolas. En ese mundo siempre se han impuesto los que tenían las armas, y cuanto más descerebrados son y menos capacidad de análisis tienen, más violentos son, y más coacción generan a su propio mundo.
¿El proceso de paz está roto?
El proceso se lo ha cargado ETA deliberadamente, porque no han conseguido de inmediato lo que pensaban que iban a conseguir. El atentado ha sido una desautorización deliberada a Josu Ternera y a la gente de la izquierda abertzale que, con alguna voluntad pero con poco acierto, habían intentado nuevamente esta experiencia. Siempre terminan imponiéndose los que tienen el aparato militar, y esto no acabará hasta que el aparato político se imponga. Y sólo se dará cuando el militar reconozca que no tiene posibilidad de vencer al Estado.
¿Otro proceso diferente también sería inviable?
Al menos hasta que ETA renuncie definitivamente a la violencia. Mientras, no va a haber Gobierno capaz de reanudar un proceso. Ahí está el buenísimo de Zapatero, con mirada angelical, dando esperanzas de un nuevo proceso. Pero ni la sociedad española ni el PSOE lo van a aceptar.
¿Peligra el estatus de Navarra?
Que Navarra es un tema en todo este proceso no hay duda ninguna. Parece evidente que algo se comprometieron para conseguir la tregua. Lo que no sabemos es hasta dónde ha llegado el Gobierno. Pero éste es un problema que ETA, tarde o temprano, acabará por revelar. Ahora, temas como territorialidad o autodeterminación van a quedar aparcados, y difícilmente se van a recuperar antes de las elecciones. Pero para una banda terrorista que lleva 40 años extorsionando, uno o dos años más no es tiempo.
¿Cree realmente que el Gobierno está dispuesto a dar a ETA alguna concesión referente a Navarra?
Es más difícil que nunca. Si hasta ahora la justificación era la paz, ahora ya se ve que ETA no está dispuesta. Pero es que además el PSOE está viendo el costo que tiene todo esto. Zapatero tenía que haber sido desde el principio más claro y más contundente. Pero es un ser melifluo. Como dijo un compañero suyo, 'ni palabra mala ni hecho bueno'. Siempre se mueve en el terreno de la ambigüedad que tanto daño le está causando. Al final sus asesores le dirán que cambie de camino, que es lo que han hecho personas políticamente más listas que él, como Rubalcaba o De la Vega.
¿El Gobierno abandonará el proceso de paz por interés electoral?
Aquí electoralismo con el tema de la paz y la violencia no sólo hace el PP, que lo hace mucho, porque sabe que le es favorable. En política todo tiene una visión electoral, y el PSOE sabe la rentabilidad que esto puede tener si sale bien. Pero si ven que puede producir un costo electoral, plegarán velas, y a ver si de paso aíslan al PP. Zapatero puede dar la imagen de que está por encima del bien y del mal, de que es un ser casi puro, un ser místico, pero los muñidores están detrás, algunos tan evidentes como Alfredo Pérez Rubalcaba, la persona más política y más inteligente del Gobierno.
En cualquier caso, en electoralismo, el PP se lleva la palma.
Si lo están haciendo, es porque lo han valorado positivamente. En la dinámica histórica que llevan saben que les ha dado resultado. Tras el atentado han ido directamente a la cabeza, a por Zapatero, como ya hicieron con González y como el PSOE hizo con Aznar. De hecho, a Zapatero intentan descalificarlo por su incapacidad para gobernar el país. Saben que lo que la gente quiere son posiciones contundentes y claras. Además, las encuestas les están dando resultado.UPN también apuesta por esa estrategia.UPN y el PP tienen un pacto que condiciona el posicionamiento de UPN en los temas de política nacional. Será UPN quien tenga que valorar si en Navarra le conviene dar esa imagen de continuismo y seguidismo del PP. Yo no lo voy a valorar. En cualquier caso, cuando tuve responsabilidades traté de separar al máximo la imagen de UPN de la del PP, y así lo pagué. Dentro de UPN no todos piensan lo mismo, pero si su presidente y la Ejecutiva lo ven oportuno, ellos sabrán.
¿Secundar ese acoso a Zapatero no perjudica la labor del Gobierno de Navarra?
El Gobierno de Navarra, en el ámbito institucional, tiene que buscar siempre las mejores relaciones con el Gobierno de Madrid, y para eso hay que eliminar las tensiones que puedan perjudicar. Si te encuentras gente tan sectaria en sus intereses partidistas como el PSOE, cualquier confrontación va a suscitar un rechazo. Si desde UPN se crean tensiones y confrontación siguiendo la estela del PP, lo que va a suscitar en el Gobierno es una actitud de rechazo. Y los socialistas no van a poner las instituciones del Estado por encima del partidismo. Hay que buscar la mejor interlocución posible a base de reducir tensiones políticas partidistas. Y esto lo he dicho en público y en privado. Navarra tiene mucho que ganar y que perder en sus relaciones con el Estado. Y en esto el PSOE es muy sectario.
¿Por qué lo dice?
Que miembros del Gobierno vengan a Navarra y no tengan interlocución con las instituciones y se limiten a actos partidistas, demuestra que están aquí por el interés del partido. Además, me consta que el consejero ha estado intentando tener una interlocución con la ministra de Fomento para hablar del Tren de Alta Velocidad, y todo lo que ha conseguido han sido reuniones con niveles inferiores. En esta cuestión hay un tratamiento claramente discriminatorio. Se están vengando de las críticas políticas que le hace el Gobierno de Navarra. ¿Por qué lo que vale para la CAV no vale para Navarra?
Los últimos cuatro años han trabajado estrechamente con los regionalistas. ¿Teme que la radicalidad que parte de la sociedad ve en el PP y UPN salpique la imagen a CDN?
Somos partidos distintos y no tenemos, ni de lejos, los compromisos que UPN tiene con el PP. Además, fuera del pacto de Gobierno mantenemos nuestra independencia y criterio, aunque haya quien interesadamente quiera vincularnos a UPN.La última vez que se desmarcaron de sus socios de Gobierno fue en el Ayuntamiento de Pamplona, a cuenta de una moción para mantener la estela de Germán que al final no salió adelante.
¿Mantendrán su apoyo si se vuelve a presentar?
Hemos hecho una propuesta a todos los partidos para sustituir la estela por una placa, de manera que sea una iniciativa oficial del Ayuntamiento. Creo que la iniciativa ha sido bien recibida por los grupos. Nosotros seguimos pensando que si no hay otra solución se reponga la estela, pero la solución puede ser, si hay consenso, una placa municipal puesta por el propio Ayuntamiento.En aquel pleno tampoco prosperó la urgencia de una moción que pedía retirar a Franco el título de hijo predilecto.
¿Su posición es la misma?
No ha habido ningún cambio, es una iniciativa que apoyamos.
"Hay fuerzas sociales que presionarán al PSN para que pacte con UPN"
Juan Cruz Alli volverá a ser el cabeza de lista de CDN al Parlamento y su primera opción tras las elecciones de mayo será reeditar la coalición de Gobierno con UPN. El presidente de Convergencia descarta cualquier acuerdo con los nacionalistas y lo ve "muy difícil" con el PSN, en parte porque no cree que los socialistas puedan ser alternativa y, en parte, porque todavía no han olvidado la última experiencia. "Con ellos ni a heredar", recuerda que dijo un militante convergente tras el fracaso del tripartito. Se permite incluso dar un consejo: "La ambigüedad perjudica al PSN".
¿Qué tal la experiencia de Gobierno?
Hemos tenido diferencias y tensiones, pero tendrán que reconocer que nuestro compromiso con Navarra es como el que más, pero desde la racionalidad, y no de la visceralidad, y que garantizamos la estabilidad institucional. UPN nunca ha tenido un socio más leal.
¿Cómo son las relaciones con UPN?
Son buenas con los miembros del Gobierno. En su día, el PP hizo todo lo posible para que no saliéramos y después para desprestigiarnos, a veces de una forma mediática importante. El tiempo les ha quitado la razón, y al final han tenido que contar con nosotros. Se han tenido que tragar todas sus descalificaciones.
¿Ve a UPN y CDN con fuerza para revalidar la mayoría absoluta?
Somos optimistas y creemos que podemos repetir. Las encuestas siempre se han equivocado con nosotros, hace cuatro años nos daban entre cero y un escaño, y sacamos cuatro. Si no hay mayoría absoluta, habrá que buscar otras opciones.
¿Por ejemplo?
Un pacto presupuestario entre UPN y PSN, una opción en la que, esperemos, nos dejen algún sitio. Aunque el PSN igual nos veta, como ya hizo en el Pacto Antiterrorista.
¿Esa opción es rentable para el PSN?
Hay gente en UPN que piensa que el pacto natural es con el PSN, y hay fuerzas sociales, económicas y mediáticas que siguen teniendo ese diseño para Navarra. Así, tienen una derecha que les garantice, y unos socialistas subordinados que controlen a la izquierda. Para quienes tienen ese diseño de Navarra, todos los demás sobramos, y no digamos los nacionalistas vascos. Por eso seguirán presionando al PSN.
¿O quién se cargó a Juan José Lizarbe?
Firmó su sentencia de muerte cuando dijo que quería hacer una alternativa a UPN con los demás. Ahora, los que le sustituyeron, están jugando a todas las cartas, pero saben que hay un sector que no va a aceptar el pacto con los nacionalistas.
¿Qué opción de formar Gobierno le queda entonces al PSN?
Su opción de verdad es el pacto con IU y Convergencia. Piensan que así forzarán a los nacionalistas a apoyar la alternativa. Dirán que son elucubraciones mías, pero a ver si son capaces de desmentirlo. Saben que no se pueden comprometer porque harán lo que les diga Madrid. Y la apuesta de Madrid es clara, eliminar el espacio del PP de las instituciones. Lo hemos visto en Cataluña, en Tafalla o Estella. No lo van a decir porque ya han experimentado en cabeza ajena, pero es tan evidente que lo demuestra su propia ambigüedad.
¿CDN estaría dispuesto a entrar?
Nosotros no vamos a estar en un Gobierno en el que estén los nacionalistas. Y aunque no estén, ¿qué viabilidad tendría el Gobierno de Puras estando a merced de Nafarroa Bai? Por eso nuestra opción es repetir el Gobierno de coalición con UPN.
¿Qué resultado le augura al PSN?
Dependerá de si en Navarra se nota o no el efecto Zapatero, y yo no tengo muy claro que el partido que tiene el Gobierno de Madrid se beneficie siempre en las autonómicas. No creo que haya variaciones sustanciales.
¿Tampoco para Nafarroa Bai?
Nafarroa Bai puede subir, algunas encuestas dicen que podría llegar a ser la segunda fuerza, pero eso dependerá de Batasuna. El electorado nacionalista es lo que es, y si está Batasuna, no todos los votos irán para NaBai.
¿Está completamente descartada la coalición entre UPN y CDN?
Fue un globo sonda, pero los órganos de Convergencia han optado por no aceptar esa posibilidad. Las coaliciones acaban por diluir la imagen. Nosotros somos un partido de centro progresista y tenemos que tener nuestro propio espacio.
¿Le preocupa que el mensaje del miedo que 'vende' UPN lleve al electorado de CDN al voto útil?
Ese es el riesgo. Está estudiado que cuando el voto se polariza por tensiones partidistas, lo hace a costa del centro. Si los extremos tensan, la sociedad se tensa, y el voto del miedo va a las posturas más radicales. Somos conscientes de ello, pero esperamos que la polarización no nos afecte, sobre todo en las zonas urbanas y entre las clases medias.
¿No tiene miedo a quedarse sin representación?
Nosotros estamos acostumbrados a apostar. No tenemos un nicho de votos cautivo, como tienen UPN o el PSOE, que les votarán siempre. Entendemos que tenemos un voto ya conseguido, y esperamos que la distensión nos lo amplíe.Los mejores resultados de Convergencia llegaron cuando más distanciados estaban de UPN.Nacimos en un momento de crisis seria, y recibimos un aluvión de votos que luego volvió a sus orígenes. Además, todo el coste del tripartido lo pagamos nosotros. Nuestra imagen fue la que mayor daño sufrió. Desde entonces nuestra desconfianza con el PSN es absoluta, porque nos engañaron. Optaron por su interés partidista, y aunque algunos en Madrid apostaban por mantener el tripartito, entregaron el Gobierno de Navarra al PP a cambio de que no deteriorara su imagen con la corrupción. Se equivocaron entonces, y se equivocan ahora. Aunque por mí, pueden seguir igual.
¿En qué se equivoca el PSN?
En esta situación de ambigüedad, en no decantarse y dejar todas las puertas abiertas para jugar a todas las bazas . La ambigüedad es total con el tema de Navarra, y querer jugar a todos los palos es malo. Fernando Puras es una persona valiosísima y de una honestidad total. Pero los acuerdos no los van a decidir aquí. Y estoy seguro de que si de Madrid presionan a Puras a hacer algo que no quiere, renunciará. Porque no debe nada al PSOE, y no es como otros paniaguaus que deben al partido lo que son en la vida.