miércoles, octubre 26, 2005

El Gobierno de Navarra ha recibido 32 ofertas para participar en el concurso de adquisición de suelo residencial


El Departamento de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio y Vivienda ha recibido 32 ofertas para participar en el concurso de adquisición por parte del Gobierno de Navarra de suelo residencial en la Comunidad Foral. El plazo de presentación de proposiciones ha finalizado hoy, miércoles 26 de octubre, a las 14 horas. Según indica el Departamento, el número de ofertas no es definitivo ya que en los próximos días pueden llegar propuestas depositadas en plazo en otros registros públicos o en oficinas de correos.
Una vez recibidas todas las ofertas, se procederá a la constitución de la Mesa de Contratación. En primer lugar se abrirá el sobre A (cláusula 6 del pliego de condiciones), que contiene la documentación administrativa del ofertante. Tras admitir las proposiciones que superen los requisitos solicitados, la Mesa de Contratación procederá a la apertura del sobre B, que contiene la oferta técnica y económica. Analizadas las propuestas, la Mesa decidirá cuáles son las mejores ofertas y las elevará al Gobierno de Navarra, que dispondrá de un mes para tomar una decisión definitiva.
Cabe recordar que el pasado mes de julio se aprobó la convocatoria del concurso para la adquisición de suelo residencial en la Comunidad foral. La finalidad del concurso es la adquisición por parte del Gobierno de Navarra, o de sus sociedades instrumentales, del suelo suficiente para garantizar las políticas públicas de vivienda protegida a medio y largo plazo. El informe indica que el suelo que se adquiera a través de este concurso se incluirá en el Banco Foral de Suelo Público, que se creó el 29 de octubre de 2001, con el objeto de intervenir en la regulación del mercado de terrenos, obtener reserva de suelo para actuaciones de iniciativa pública y facilitar la ejecución del planeamiento.
Los suelos que podrán ser objeto de oferta en el concurso deberán estar calificados como urbanos o urbanizables destinados a la promoción de viviendas, o como no urbanizables que en razón de su ubicación y características fueran susceptibles de reclasificación. Con este procedimiento, el Gobierno continúa con su política de suelo y vivienda donde la objetividad y la transparencia son dos factores predominantes.